Durante toda mi vida, siempre ha existido la posibilidad de una tercera guerra mundial. Nací en 1981, unos años antes del fin de la guerra fría, y a pesar de la paz, siempre sabemos que existe la posibilidad de una tercera guerra mundial. Tal vez es un poco fuerte decir tercera guerra mundial, pero esto es lo que dicen los medios de comunicación cuando hablamos de la guerra en el horizonte. Hablemos un poco.
Hace tres semanas, Vladimir Putin, el presidente de Rusia, decidió invadir el país de Ucrania sin provocación y ahora estamos viendo una guerra entre los dos países. Los países de Europa no quieren involucrarse en la guerra, pero el temor es que Rusia, una vez haya conquistado a Ucrania, va a seguir intentando conquistar países de Europa. Una guerra entre Rusia y Ucrania es mala, pero una guerra entre Rusia y Europa será devastadora. Si los EEUU se une a la guerra, podríamos ver el uso de armas nucleares, y esto me da miedo. No, miedo no es una palabra bastante fuerte. Aterrorizado. Sí, eso es mejor.
No quiero pensar en las consecuencias de usar armas nucleares, y más aún, no quiero pensar en que tan cerca estamos a Rusia. He visto que más de dos millones de Ucranianos huyen de sus hogares, familias que hace un mes eran familias normales, justo como tú y yo. En solo unos días, se han convertido en refugiados. No puedo ni quiero pensar en la posibilidad de que esto nos pase a nosotros.
Tengo una hija de cinco años. No puedo dejar de pensar en ella y su futuro. He vivido mi vida, y mientras no soy viejo, he tenido las oportunidades de hacer y ver cosas en mi vida. Sus ojos ya no han visto nada de este mundo y ella merece tiempo para crecer y experimentar cosas bonitas. Me hace llorar cuando pienso en que tan feas pueden ser. Tenemos que parar esta guerra, no para mí, sino para mi hija.
La cosa más triste es que ella aún no tiene ninguna idea de lo que está pasando en nuestro mundo. Sí, ella escucha cuando sus padres hablan y nos hace preguntas, pero en realidad, no entiende muy bien qué está pasando. Tal vez es mejor para ella. No lo sé. Lo que sí, yo sé es que tenemos que seguir viviendo nuestras vidas. No me gusta pensar que una guerra es inminente y tengo que tener la fe de que los gobiernos van a trabajar para encontrar una solución. Tienen que parar este monstruo.
En verdad, no sé qué más podría escribir hoy. Solo necesité compartir mis sentimientos hoy, porque si no lo hice, puede que hubiera explotado. Todos queremos a nuestros hijos y haríamos cualquier cosa para protegerlos, pero esta situación mundial me da tanto miedo y no sé qué hacer. En todo caso, debo irme. Hablaremos más pronto. Hasta luego.